sábado, 20 de agosto de 2011

Dies aparentment rutinaris però diferents

Va ser justament ahir, jo anava dins del tren i com sempre el tren va fer la seva parada a Masnou però aquest cop va quedar-se allà 10 minuts. Ell estava allà, fora del metro i esperant el tren que venia en l'altra direcció. Portava ulleres de sol però encara i així em donava la sensació que ens miràvem, jo al menys ho feia. Al cap d’uns minuts es va treure les ulleres i sí, les nostres mirades es van creuar tota la resta de minuts. Era un noi amb un look informal però atractiu, barbeta i aparentment més gran que jo. Quan van passar els 10 minuts el tren va començar a tancar les portes. Ell em va dedicar un somriure i em va aixecar el cap com a símbol de acomiadament, jo li vaig respondre igual. Seguidament es va posar un altre cop les ulleres de sol. Poc a poc el meu tren es posava en marxa i s'allunyava d'aquella parada...
Nacer, crecer; bailar la vida! :)


Parece mentira que todo haya acabado así... ayer ponía la mano en el fuego por ti y hoy... me quemo, ardo. Cuantas veces hemos estado los dos enredados entre las sabanas, cuerpo a cuerpo, entregándonos al placer acompañado de esa pasión que sobresalía por cada poro de nuestra piel. Me entregaba a ti como si se me fuera la vida en ello, perdiéndome en tu aroma sin importarme nada de lo que dijeran de mi, de nosotros. Te contemplaba una y otra vez mientras nuestro cuerpo cansado volvía a reponerse pero con mayor fuerza, me llegaba a preguntar el porqué te quería tanto, el porqué los comentarios de la gente estaban de más y solo me centraba en ti, no te lo voy a negar, era mi mayor entretenimiento... tú al momento abrías los ojos y con solo mirarme nos volvíamos a perder, me volvías a acariciar y... no puedo evitarlo, hoy todo esto me duele... las sabanas están desordenadas pero esta vez por el viento, tu hueco de la cama cada vez está más frío, me atrevería a decir que está helado. Ahora no puedo contemplar nada, únicamente esas voces que se han apoderado de nosotros... para que engañarnos a veces el querer no lo es todo, sabes de sobras que a nosotros de eso nos sobraba pero…  

Inspiración "Sere nere-Tiziano Ferro": http://www.youtube.com/watch?v=Ga9sIlmVh50

Y pasaron los días, las semanas, me atrevería a decir que los meses, y ella estaba ahí, vagabundeando por esas calles agotadoras, las cuales un día le llevaron al placer de la felicidad. La misma plaza de siempre, la misma gente de siempre, todo era lo de siempre, pero con una diferencia. Ya no volvería a entrar a ese piso, de grandes ventanas, de gran comodidad en el cual se encontraba ese chico, aquel que deshizo todas las ilusiones por no poder luchar un poco más, quizás no quería. Estaba parada enfrente de su portería, mirando su balcón, se daba cuenta que el sol ya no apretaba como siempre, más bien las nubes grises se entorpecían en el camino. No entendía como podía querer tanto a una persona pese al daño que se habían echo, sabía que no podía hacer nada, porque la cobardía le invadía al pasar cada día por esa calle. Siempre se quedaba observando la fachada, seguía siendo la misma, quizá un poco más deteriorada. Pensaba en presentarse delante de su puerta, pero no, era inútil, y ella seguía el mismo camino, se alejaba sin mirar atrás porqué sabia que la realidad era esa. Empezaba a llover, eran gotas finas que deslizaban lentamente por la piel. Seguía aumentando y cada vez de forma más continuada, le encantaba mojarse bajo la lluvia, pero ese día no se sentía ni con fuerzas de jugar en ella, solo tenía ganas de llegar a casa. Mientras avanzaba, escuchó una voz, le resultaba familiar, pero se perdía entre el ruido de la lluvia al tocar al suelo y no la escuchaba con claridad. Además se había jurado no girarse, era atormentarse más de lo que hacía. Quizá era su propio pensamiento que estaba obsesionado. Pero esa voz insistía, una y otra vez. Era una voz masculina. Quieta, inmóvil, se quedó en su sitio, no quería, no podía girarse. Se puso a llorar. Una mano tocó su hombro, ésta se deslizaba por su cara, le acariciaba suavemente pero llena de nostalgia sumada de pasión. Tenía grandes escalofríos, era una mezcla de frío y esas sensaciones olvidadas que volvían a encontrarse. Sabía que ya no era obsesión, que estaba sucediendo y no podía negarse. Se giró y entorpeció con su mirada, esa mirada que hablaba por si sola. Ella necesitaba hablar, pese que sus lágrimas le entrecortaban, pero era inútil. Esa mano se interpuso en su boca… y lentamente se acercaba a ella, mientras se perdía suavemente por sus labios, haciéndoles callar de la forma más diferente pero bonita a la vez. Y pasaron los días, las semanas, me atrevería a decir que los meses y ellos decidieron luchar por lo que querían.  

miércoles, 10 de agosto de 2011

Huye. Vuela.

Cierra los ojos. 
Huye. Huye lejos, donde te lleve la imaginación...
Vuela. A veces es necesario volar de la realidad...




martes, 9 de agosto de 2011

Quiero, aunque... :)

Quiero regalarte todos mis despertares, desde el más amargo al más dulce.
La más tierna y dulce sonrisa acompañada de un "buenos días, mi amor", junto a la caricia y al beso más suave, o pasional que hayas sentido. Aunque a veces esto no se cumpla porque o tú, o yo,  nos hemos levantado con el pie izquierdo...
Quiero quedarme un rato en la cama y observar tu cara de dormido, llena de legañas, y seguir observándote mientras te levantas dirección al lavabo. Aunque a veces el sueño se apodera de mí y no consigo ni abrir los ojos del cansancio que tengo.
Quiero regalarte mis desayunos, aunque a veces se me quemen las tostadas o la leche la haya calentado demasiado en el microondas. En el fondo sé que te encanta, menos cuando me duermo y directamente ni se me quema, ya que eso quiere decir que no me he levantado.
Quiero ir dirección al lavabo, ver que ya te has puesto guapo, un poco más de lo que estabas, y que me des un beso en la frente, solo como tu haces, haciéndome sentir una niña. Aunque a veces me quede sin beso ya sea porque te hayas levantado torcido, o yo misma me haya levantado igual...
Quiero desperdirte, como siempre hago, en la puerta. Que me regales cada uno de tus besos y me digas "nos vemos luego, cariño" y que justo 8h después te vea aparecer por la misma puerta. Esta vez con la cara de cansado. Ya sabes, depende como, o no te espero en la puerta, o tú llegas del trabajo tan cansado que ni cruzamos palabra.
Quiero pegarme una de las tantas duchas que nos pegamos mientras dejamos envolvernos por el cariño, la ternura y la pasión. No todos los días la compartimos, somos personas y no siempre estamos bien, lo importante es encontrar momento para todo.
Quiero estar en el sofá mientras jugamos a juegos chorras, simplemente para pasar un rato juntos y así  compartir las anécdotas de todo lo que nos ha pasado durante el día. Aunque a veces tanto compartir anécdotas hacen sacar la parte negativa del día.
Quiero taparte con la manta del "mickey y la minnie" mientras me acurruco en tus brazos y nos ponemos una de las tantas pelis que tenemos que la estantería del comedor, hasta quedarnos dormidos y así empezar un nuevo día aunque a veces me despiertes con tus ronquidos... :)